Uno de los remedios mas efectivos para sanar nuestra alma y darle un respiro al corazón es dejando de esperar. Somos seres de luz y amor, sin embargo nuestra mayor parte de energía la mayor parte de tiempo esta enfocada en "esperar" y no enfocamos en la espera como algo productivo, simplemente esperamos..
"Espero que hoy en el trabajo reconozcan mi esfuerzo." "Espero encontrar un mejor empleo." "Espero a que llegue mi alma gemela." "Espero a que me diga que me quiere, que me ama, que me extraña, que me de un detalle."" Espero a que se de cuenta lo valioso que soy."
¿Sigo?
Por que de seguro habrá una larga lista de las cosas que seguimos esperando y esperando..
Nutrimos nuestra energía de lo que deseamos que los otros hagan por nosotros o de la reciprocidad cuando ya algo a cambio, nuestro entorno se vuelve vació, por que solo estamos a la espera; que es como cruzar los brazos en un cuarto oscuro y perdemos la noción del tiempo en un trágico y largo sendero, esperando a la luz llegue, que alimente nuestra felicidad.
Sin pensar que esta viene de tu mano cuando aprendes a dar sin esperar nada a cambio, has aquello que te apasiona, que te hace feliz, que te motiva.
Da, simplemente da ya sea por amor y no por compromiso, no por ver que recibes o creces merecer. Que tu energía fluya a favor de los demás, comparte sin esperar. Por que cuando tu culminas con la satisfacción de haberlo echo con amor, el universo se encarga de corresponderte con lo que sanamente te beneficie,
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